Río Napo
Este río sudamericano nace al pie de los volcanes Cotopaxi y Antisana (Ecuador) de las vertientes andinas, así como de las cabeceras de ríos en las montañas de Chalupas, los Llanganates, y la cordillera de Guacamayos, en las estribaciones de la cordillera oriental de Los Andes (Cueva, 2005).
El río Napo es uno de los principales afluentes o tributarios septentrionales del río Amazonas en su curso alto, que recorre territorios amazónicos de Ecuador y Perú. Discurre a lo largo de 1.130 km hasta su desembocadura en el departamento de Loreto en Perú, cerca de la ciudad de Iquitos. Tiene una superficie de 100.518 km2.
Por otra parte, la cuenca del río Napo es de gran interés histórico. Se trata de la ruta fluvial seguida durante el proceso de exploración de la cuenca amazónica por parte de los colonizadores y misioneros europeos, entre ellos Orellana y su tripulación en el siglo XVI, quienes descendieron por el Napo y el río Amazonas hasta alcanzar el océano Atlántico; también refiere la ruta utilizada por el portugués Pedro Texeira entre 1636 y 1638 para alcanzar la ciudad de Quito en el siglo XVII; igualmente fue el asiento de misiones religiosas jesuitas y franciscanas durante los siglos XVII y XVIII (Arroyo-Kalin y Rivas Panduro, 2016).
Según Laraque, citado por Arroyo-Kalin y Rivas Panduro (2019), el cauce del río Napo a lo largo de la planicie amazónica se puede describir como una sucesión de ensanchamientos y estrangulamientos entre 3 km y 500 m de ancho; su caudal es fluctuante a causa de las fuertes lluvias y descargas de ríos tributarios, entre ellos los ríos Yasuni, Aguarico, Curaray y Mazán. Por otro lado, el Napo es considerado un río de aguas blancas con altos niveles de sedimentos en suspensión generados por los procesos de erosión del macizo andino. Así mismo, se caracteriza por la presencia de terrazas aluviales bajas que son propicias a quedar sumergidas debido a las crecientes del río, por tanto sus márgenes generalmente son inestables debido a la erosión lateral de su propio cauce.
En el río Napo, aunque su caudal actualmente no es navegable, es posible la práctica de rafting y kayac. Así mismo, se puede intercambiar con indígenas de la cultura Kichwa en diversos centros de turismo comunitario, participando en actividades como danzas, degustación de gastronomía local tradicional, elaboración de artesanías, entre otras tradiciones ancestrales.
Referencias
Arroyo-Kalin, M. y Rivas Panduro, S. 2016. Tras el camino de la boa arcoíris: las alfarerías precolombinas del bajo río Napo. En: Barreto, C., Lima, H. P. & Jaimes, C. (eds.) Cerámicas arqueolôgicas da Amazônia: Rumo a uma nova síntese. Belém: Museu Paraense Emílio Goeldi / IPHAN.
Arroyo-Kalin, M. y Rivas Panduro, S. 2019. La arqueología del río Napo: noticias recientes y desafíos futuros. Revista del Museo de La Plata, 4(2), 331-352.
Cueva, R. 2005. Diagnóstico de los recursos naturales en el territorio de seis comunidades kichwas asentadas en la zona noroccidental del parque nacional Yasuní, Río Napo, Orellana-Ecuador. Ecuador: Wildlife Conservation Society, WCS.
