Los cactus pertenecen a la familia de las cactáceas. Una familia originaria de América, que cuenta con unas dos mil especies, distribuida en todo el continente americano, desde el norte de Canadá hasta la Patagonia. Que crecen desde el nivel del mar, en la costa, hasta alturas de hasta 5.100 msnm. Una familia muy especial.
A pesar de su origen americano, yo no sentía mucho aprecio por los cactus. Creía, en primer lugar, que solo habitaba en las regiones semiáridas de la costa, abundantes en los paisajes pobres de México, donde, a duras penas, se logró colar con gran esfuerzo imaginativo en su gastronomía. Eran unas plantas que nada me inspiraban, plantas espinosas de aspecto áspero y rústico, de pencas suculentas y de escasa belleza, a menos que uno se contentara con una estructura vegetal sin mucha gracia, pues ni flores tenía.
Ignoraba casi todo sobre los cactus hasta que los comencé a estudiar y conocer. Y me quedé sorprendido de mi gran ignorancia. Y me volví un enamorado de sus hermosas flores, en realidad, hojas modificadas que toman alegres colores como una eficaz estrategia para lograr su reproducción y supervivencia como especie.
Las flores de los cactus: hermosas y efímeras
Todos los cactus florecen, pero la duración de sus flores es efímera. Abren de manera explosiva, de un golpe, sin que casi lo advirtamos. Y luego desaparecen, durando solo uno o dos días. Con el cactus se cumple estrictamente aquella canción: eres flor de un día. Un suspiro apenas, pero de una gran belleza. De acuerdo con la especie, hay cactus de flores rosadas (como Echinopsis cyriesii), O de flores blancas (Echinocereus leucanthus), o amarillas (Astrophytum myriostigma), o rojas (Ephyllum hibrido flor roja), o anaranjadas (Aloe dichtoma).
Hay cactus de flores pequeñas, que abren de día, o de flores grandes, que abren de noche. Las flores de día son polinizadas por abejas, moscas, pájaros. Las de noche, son polinizadas por murciélagos y polillas, una suerte de mariposas deslucidas, con alas de colores tristes. Mariposas y polillas son del mismo grupo, de los lepidópteros. Se diferencian en que las mariposas son de hábitos diurnos, suaves, delicadas y con alas de vistosos colores, mientras que las polillas son mariposas nocturnas, de cuerpo corpulento y peludo y con alas de colores apagados.
La especie Strophocactus wittii
Entre todos los cactus hay uno especial, Strophocactus wittii, el cactus flor de luna amazónico, que crece, como una epífita, aferrada a los troncos de los árboles del bosque húmedo tropical, en los igapós de la cuenca amazónica central. Igapó es una palabra brasileña empleada para designar a los bosques amazónicos, que permanecen inundados durante gran parte del año en las zonas bajas cercadas a los ríos de aguas negras. Ese cactus se sostiene al tronco del árbol con bandas como vendas que lo rodean, ayudado por las raíces aéreas del propio cactus. Lo descubrió en 1889 Nicholaus H. Witt, un empresario alemán, aficionado a la cría de cactus. Lo distinguió en la zona pantanosa por sus hojas de un color bermellón, o rojo por su contenido en bentalaína. Después, esta especie fue encontrada en muchas regiones amazónicas de Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela.
Flor de Luna / ¿Selenicereus wittii?
La especie de cactus Strophocactus wittii, florece solo una vez al año, pero la flor que emite dura apenas unas doce horas: abre desde el final de la tarde, cuando el sol se oculta, hasta el amanecer. No es el único cactus que lo hace, pero su floración es espectacular. Es un cactus nocturno, de flor grande y muy vistosa, por eso quisieron cambiar el nombre por Selenicereus wittii, en honor a Selene, la diosa de la luna en la mitología griega. Pero unos años después, en 2021, retomó su nombre científico inicial. La flor nace en el mes de mayo en el hábitat natural. Es larga y se separa del cuerpo de la planta unos 28 centímetros, lo que la hace muy atractiva y rara.
Al abrir despide un fragante aroma que, al cabo de dos años, se convierte en un olor desagradable, por la presencia de compuestos bencílicos (alcohol, benzoato y salicitato de benzilo). Por su condición de flor nocturna, es polinizada por murciélagos y polillas que buscan su néctar, que reposa al fondo de su largo tubo floral de donde es extraído por la trompa, probóscide, de sus polinizadores, murciélagos, y de polillas de las especies Cococttus cruentas y Amphimona walkeri.
Video: vea a la flor de luna (Strophocactus wittii) floreciendo y marchitandose en cámara rápida (24h en sólo 1 min)
El Dr. Rafael Cartay es un economista, historiador y escritor venezolano mejor conocido por su extenso trabajo en gastronomía, y ha recibido el Premio Nacional de Nutrición, el Premio Gourmand World Cookbook, Mejor Diccionario de Cocina y El Gran Tenedor de Oro. Inició sus investigaciones sobre la Amazonía en 2014 y vivió en Iquitos durante 2015, donde escribió La Tabla Amazónica Peruana (2016), el Diccionario de Alimentos y Cocina de la Cuenca Amazónica (2020), y el portal en línea delAmazonas.com, de del cual es cofundador y escritor principal. Los libros de Rafael Cartay se pueden encontrar en Amazon.com